La Toyota Hilux del IPV era guiada por Néstor Chávez, quien era acompañado por Lucas Saravia; los dos debieron ser trasladados al Hospital Ushuaia para su atención.
El accidente fue producto del estado resbaladizo de la calzada y la velocidad en la que se trasladada el personal a cargo de la misma, lo que provocó el vuelco y los daños totales sobre la camioneta.