El estado de salud de Jair Bolsonaro ha sufrido un deterioro significativo, según informaron este jueves los médicos que lo atienden en un hospital de Brasilia. Tras su reciente operación intestinal, el expresidente brasileño experimentó una elevación de la presión arterial y un empeoramiento en los resultados de los exámenes hepáticos.

El parte médico emitido por su equipo de salud indicó que, además de las complicaciones en la presión arterial, los exámenes realizados mostraron un agravamiento en las funciones hepáticas, lo que ha aumentado la preocupación por su recuperación. Como medida preventiva, Bolsonaro será sometido a nuevos estudios de imagen para evaluar con mayor precisión su estado actual.

A pesar de estos contratiempos, el exmandatario continúa recibiendo un tratamiento riguroso. Se mantiene bajo un estricto régimen de ayuno oral, mientras se le suministra nutrición parenteral exclusiva. Además, se le realiza fisioterapia motora para asistir en su recuperación física y se toman precauciones para prevenir posibles trombosis venosa, una complicación común en pacientes postoperatorios.

La operación a la que fue sometido Bolsonaro el pasado 13 de abril duró más de 12 horas. Esta intervención fue necesaria debido a un nuevo problema intestinal, el sexto en la misma zona desde que, en septiembre de 2018, Bolsonaro fuera apuñalado en el abdomen durante un acto de campaña para las elecciones presidenciales de ese año. Las secuelas de ese atentado han obligado al exmandatario a someterse a múltiples cirugías a lo largo de los años, debido a las graves lesiones internas que sufrió en ese momento.

El exlíder brasileño, que estuvo en el poder entre 2019 y 2023, ha tenido que enfrentarse a una serie de problemas de salud a lo largo de su vida política, muchos de ellos derivados de la agresión que casi le costó la vida. Si bien ha superado varios momentos críticos, la reciente complicación ha reavivado las preocupaciones sobre su bienestar, tanto en su entorno familiar como en la opinión pública, que sigue de cerca los avances de su recuperación.

A medida que la situación se desarrolla, se espera que el equipo médico continúe evaluando su estado y tomando las medidas necesarias para garantizar la mejor recuperación posible del expresidente.