Desde la fuerza informaron que el hecho sucedió cuando personal de la Prefectura recibió un llamado al 106, número de emergencias náuticas, en el que un ciudadano informaba haber avistado un cetáceo en la superficie del agua, enredado con cabos. Dichas líneas estaban aprisionando a la ballena en la cabeza y todo su cuerpo por lo que le era imposible liberarse por sus propios medios.
De inmediato la Prefectura Ushuaia se montó un operativo para asistir al lugar, destacando una lancha rápida y nadadores de rescate. Al arribar al lugar y junto a deportistas náuticos locales que se hallaban en la zona, se logró cortar los cabos y líneas que se encontraban reteniendo a la ballena.
Tras arduas tareas se pudieron cortar dichos elementos que retenían al cetáceo el cual tras ser liberado continuó su rumbo por el Canal Beagle.
Cabe decir que en los últimos años cada vez es más común avistar ballenas en el Canal Beagle, las cuales atraviesan el Canal Beagle entre el Océano Atlántico y el Pacifico en busca de comida o siguiendo algún cardumen para alimentarse.