Europa está perpleja ante la oleada de denuncias de personas que aseguran haber sido pinchadas con agujas en medio de grandes multitudes de personas como recitales o en el interior de boliches. Francia, Gran Bretaña, Bélgica y Países Bajos son algunos de los países en los que se reportaron estos misteriosos ataques en los últimos meses y que son objeto de investigación por las autoridades de cada país.
En Francia, por caso, más de 300 personas denunciaron haber sido atacadas de manera imprevista. Médicos y fiscales se están ocupando del tema, pero nadie sabe quién lo hace ni por qué. Tampoco pudieron determinar si a las víctimas les inyectaron drogas o alguna otra sustancia.
Los propietarios de los locales, mientras tanto, están tratando de concientizar a la población. La preocupación es tal que recientemente, un rapero interrumpió su espectáculo para advertir a los asistentes del riesgo de ataques sorpresa con agujas.
En su mayoría las víctimas son mujeres y tienen marcas visibles de la inyección, normalmente hematomas, y reportan como síntoma una sensación de aturdimiento.
Denuncias
La policía francesa afirmó que 302 personas presentaron denuncias formales por casos similares. Hay varias investigaciones policiales abiertas en distintas regiones, pero por el momento no se logró avanzar dar con ningún sospechoso y mucho menos con una detención. No se encontraron agujas en lo lugares en que aseguraron haber sido pinchados y los motivos detrás de estos ataques siguen sin estar claros.
Ninguna víctima reportó abusos sexuales. Solo en la ciudad francesa de Grenoble, una de las víctimas dijo en abril que le habían, según reportó el diario Le Monde.
Por su parte, el gobierno de Gran Bretaña está estudiando una serie de «pinchazos con agujas» y las policías de Bélgica y Países Bajos también están investigando casos dispersos.
