Un escándalo inédito sacudió este lunes el Senado cuando la senadora fueguina Cristina López denunció a personal de seguridad de la cámara alta por «golpes» y «manoseo» cuando llegó a las puertas de su oficina, junto a un cerrajero, para abrirla.
El escándalo se produjo porque Victoria Villarruel cambió las cerraduras de los despachos de los senadores salientes para administrar la entrega de las llaves a los nuevos integrantes, una resolución que comunicó vía decreto en septiembre pasado.
En este contexto, el gobernador Gustavo Melella, quien acompañó a la Senadora durante su jura días atrás en el Congreso, se expresó a través de sus redes sociales.
«Quiero expresar mi repudio a los hechos ocurridos hoy en el Senado de la Nación, que derivaron en una situación de tensión y maltrato hacia la senadora fueguina @crislopeztdf. Estos episodios no pueden naturalizarse ni pasar por alto«, afirmó.
El mandatario fueguino expresó además que «acompaño a Cristina López y solicito que lo sucedido sea investigado con seriedad para esclarecer responsabilidades. Las y los representantes del pueblo deben poder ejercer su tarea con total libertad y en un entorno de respeto«.
«Los derechos constitucionales y el respeto por la representación democrática deben garantizarse siempre. Cuando se vulneran, se debilita la confianza en las instituciones y se habilitan prácticas que como sociedad no podemos aceptar«, cerró.

