Claramente, y casi descaradamente, hace años se viene evidenciando una notoria metodología por parte de grande sectores del poder, contrario a los intereses del pueblo, con la participación de los partidos políticos afines, la complicidad de los medios hegemónicos de comunicación y parte de la Justicia con el armado de causas judiciales, buscando eliminar todo tipo de adversario político y a su vez, ejercer un control social, a través de imponer el miedo y el castigo a quienes intenten representar interés distintos a los que el poder real ostenta.
Por tal motivo, condenamos el Lawfare como nuevo método antidemocrático de ataque a los gobiernos populares de la región y en claro detrimento de las voluntades de nuestros pueblos.
Nos solidarizamos con la compañera Cristina Fernández de Kirchner y llamamos a los argentinos y las argentinas a reflexionar y prestar especial atención a lo que está ocurriendo a nivel judicial para evitar que se concreten acciones vergonzosas como las señaladas. El país necesita de una Justicia que respete los derechos humanos y garantice un servicio de justicia imparcial.