La clínica San Jorge de Ushuaia, uno de los principales prestadores de la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF), continúa brindando sus servicios pese a la millonaria deuda que la obra social mantiene con la institución. No obstante, la administración de la clínica solicitó la rescisión del contrato vigente, con el objetivo de negociar nuevas condiciones en la prestación del servicio de salud. Así lo confirmó por Radio Provincia su titular, el doctor Carlos Sánchez Posleman, quien detalló la compleja situación financiera que atraviesa la institución y las dificultades para garantizar la continuidad de la atención.
Según explicó Sánchez Posleman, la deuda de OSEF con la clínica ronda los 6.000 millones de pesos y, si bien el gobierno realizó un pago que permitió evitar la interrupción del servicio, la problemática persiste. «La deuda es constante, porque venimos cobrando meses atrasados y se van venciendo, y trabajo ahí permanentemente, entonces es muy difícil bajar la deuda», sostuvo el titular de San Jorge, al tiempo que remarcó que «en ningún momento los servicios se cortaron» y que solo se emitió una advertencia ante la falta de pagos.
El sanatorio envió una carta formal de rescisión del contrato con 30 días de anticipación, lo que haría efectiva la terminación del acuerdo el 10 de marzo. «Queremos renegociar el contrato. A nuestro entender, el contrato no se cumple como estaba pautado», explicó. Según detalló, el convenio firmado en 2021 estipulaba que las actualizaciones de los pagos estarían atadas a los aumentos salariales de los empleados públicos y los trabajadores del sector de clínicas y sanatorios. Sin embargo, esa ecuación no se ha respetado, generando un desfasaje que afecta el equilibrio financiero de la institución.
En este contexto, remarcó la necesidad de establecer un nuevo esquema que garantice el financiamiento del servicio. «Nosotros tenemos casi 460 empleados, realmente es una estructura grande, pesada, que requiere que a fin de mes a la gente se le pague porque trabaja. No concibo que no se les pague, que paguemos en cuotas o que ellos sean partícipes de las pérdidas y no de las ganancias», afirmó.
Sánchez Posleman también hizo referencia a la crisis estructural del sistema de salud en el país y el desafío que enfrentan las obras sociales provinciales. «El sistema de salud nacional está en serias complicaciones y podíamos dividirlo en cuatro grupos: las prepagas, las obras sociales sindicales, el PAMI y las obras sociales provinciales. Este último grupo es el mayoritario, con casi 9 millones de afiliados, pero lamentablemente no trabajan en forma conjunta para optimizar recursos», señaló.
Sobre OSEF en particular, explicó que su crisis financiera se arrastra desde hace varios gobiernos y que responde a diversos factores, entre ellos el traspaso de jubilados con aportes reducidos, la incorporación de beneficiarios del sistema RUPE sin una fuente de financiamiento específica y la carga que representa el régimen de jubilación anticipada de los «25 inviernos». «Mientras aportaban el 3% más el 9% estaban en OSDE. Cuando me vuelvo, me vuelvo con el 3% nada más, que es lo que aporta el jubilado. Ese fue uno de los primeros problemas desde el nacimiento de la obra social», indicó.
El problema se profundiza con el alto costo de los medicamentos y la tecnología médica. «Los medicamentos de alto costo más los de alta rotación, los comunes como el Ibupirac o el Amoxidal, implicaban en el presupuesto alrededor de un 30%, un 33%. Hoy, ese mismo consumo se lleva el 66% del presupuesto de la obra social», detalló.
Además, recordó que «la industria farmacéutica aumentó un 500% el año pasado» y que el modelo de financiamiento de las obras sociales quedó obsoleto frente a los cambios en el sistema de salud.
A modo de conclusión, el titular de San Jorge subrayó que la crisis de OSEF es, en esencia, un problema económico que requiere una reestructuración urgente. «OSEF tiene un problema económico y hay que hacer una reingeniería de cómo financiamos a la obra social», planteó. Mientras tanto, la clínica continúa brindando atención a los afiliados, a la espera de una renegociación contractual que permita garantizar la sustentabilidad del servicio en el futuro.