Cuando las personas juegan a la quiniela, sueñan con ganar un premio millonario que les permita cubrir una multitud de gastos. Sin embargo, la reacción de los ganadores no siempre es la que se espera. En este caso, una mujer tuvo la suerte de ganar, pero se rehúsa a cobrar la impresionante suma por un motivo sorprendente.
La señora tiene por costumbre comprar boletos de juegos de azar, pero jamás imaginó tener tanta suerte. Al enterarse de su victoria, hizo una solicitud inusual que le fue denegada: hay reglas establecidas que deben cumplirse sin excepción. Ante esto, la ganadora decidió «luchar» por su dinero.
Ella no quiere revelar su identidad ni que sus vecinos descubran su nombre, ya que eso significaría que sabrían que tiene todo ese dinero en su poder. Ahora, emprendió acciones legales con la esperanza de que se le conceda el anonimato y pueda recibir la suma que le corresponde.
Cuánta plata ganó la mujer en la lotería y por qué motivo no quiere cobrar el premio
La ganadora es originaria de New Hampshire, en Estados Unidos. Obtuvo un premio de 560 millones de dólares en el juego llamado «Powerball», que es muy popular en el país. Aunque se dio cuenta a tiempo de su victoria, su intención es reclamar el premio a su manera.
Ella solicitó mantener su identidad en secreto, pero eso resulta complicado de lograr. Las reglas de la lotería en esa región exigen que la entrega del premio sea «un evento público» y que la identidad del ganador sea revelada. En este contexto, la ganadora inició una demanda legal para que se le permita recibir el dinero sin revelar su nombre.
Para proteger su privacidad, la ganadora se identificó en todos los documentos judiciales como «Jane Doe». En su demanda, solicita recibir el premio en efectivo y mantener su anonimato. «Ella ha sido residente de New Hampshire durante mucho tiempo y está comprometida con su comunidad», declaró su abogado, Steven Gordon.
«Ella desea seguir trabajando y poder ir al supermercado o asistir a eventos públicos sin ser reconocida ni tratada como la ganadora de 500 millones de dólares», añadió Gordon, defendiendo su petición de privacidad.