Alicia Mabel Reynoso tiene 65 años, nació en Entre Ríos, formó parte del equipo de catorce enfermeras de la Fuerza Aérea que integró el Hospital Reubicable instalado en Comodoro Rivadavia, donde realizaron tareas de atención y evacuación durante la guerra de Malvinas y en plena pandemia participó en la vacunación preventiva con los adultos mayores.
La mujer siente que participa de otro momento histórico, esta vez a raíz de la pandemia, al trabajar como enfermera en el Centro de Salud Aldea Grapschental, en Paraná, Entre Ríos, mientras espera que llegue su jubilación.
«Participé en la vacunación preventiva con los adultos mayores. Me tocó al principio vacunarlos, contenerlos también, estaban muy asustados», contó Reynoso sobre su labor actual durante la pandemia, en diálogo con Télam.
El reconocimiento
Tras una lucha que lleva 23 años para visibilizar la labor de las mujeres durante el enfrentamiento militar, el pasado 7 de mayo Reynoso fue reconocida oficialmente como veterana de guerra por un fallo de la Sala II de la Cámara de la Seguridad Social.
Reynoso participa, junto a Stella Morales y Ana Masitto, del documental de Federico Strifezzo «Nosotras también estuvimos», que cuenta el reencuentro de algunas de las enfermeras que atendieron a los heridos en Malvinas desde un hospital móvil ubicado en Comodoro Rivadavia.
La pandemia
Sobre su experiencia en esta nueva etapa, agregó: «Ha sido un año difícil para todos y sobre todo para aquellos que ejercemos todavía la profesión. Somos conscientes de la edad que tenemos, de los peligros que corremos. Yo también soy personal de riesgo, soy mayor, hipertensa, con un ACV recuperada».
Sin embargo, para Alicia hay un tema que la inquieta y al que desea darle relevancia: «Yo rezo para que los ciudadanos y ciudadanas tomemos conciencia y no hagamos de esta pandemia un partido político, llevando agua para el molino que conviene. Esto es un problema mundial y la salud nos atañe a todos y no podemos andar pidiendo que salgan, diciendo que no sirven las vacunas, diciendo ‘no hagan caso’ cuando se nos están yendo muchos argentinos y argentinas y eso nos tiene que doler a todos».
Y concluyó: «Nuestros compañeros no dan más. Es el Día de la Enfermería y la única manera de homenajearlos y respetarlos es valorar su trabajo, su profesión, cuidándonos, y aquellos que tienen la función de conducir reconocerlos como profesionales y pagarles el sueldo que dignamente se merecen».