La conciliación obligatoria que no resolvió nada
Hace una semana, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria para todas las empresas electrónicas de la provincia, lo que –en teoría– suspendía medidas de fuerza y obligaba a las partes a negociar. Pese a ello, varias plantas, incluidas las de Mirgor y Newsan, mantienen asambleas y ausentismo. Los dirigentes de UOM y de los sindicatos de los supervisores (ASIMRA) señalan que la conciliación no frena “el vaciamiento de hechos” ni la demora en la presentación de propuestas concretas.
Puntos de conflicto: garantías y montos
Según pudo saber Red23, las empresas ofrecen prórrogas de convenios actuales con compromisos “muy acotados” en materia de inversiones y capacitación, mientras que los gremios reclaman un documento vinculante que incluya:
* Cláusulas de pase a planta para el personal contratado a término.
* Fondo de capacitación y reconversión ante eventuales cierres de áreas.
* Comisión de seguimiento tripartita (Estado–gremio–empresa) con plazos y sanciones claras.
La pulseada política: anuncios vs. realidades
El Ejecutivo provincial buscó capitalizar el anuncio y presionar a los sindicatos con llamadas públicas al “diálogo urgente”. No obstante, desde las bases advierten que estas presiones mediáticas no bastan: “No vamos a firmar un papel vacío que mañana se borre con un tuit”, dijo un delegado de UOM a este medio. Por su parte, el gobierno insiste en que “hay buena voluntad” pero admite retrasos en la redacción del texto final, y tensiona ofreciendo incentivos fiscales que aún no están reglamentados.
¿Hacia dónde va la industria fueguina?
Con la temporada de producción al límite y el telón de fondo de la eliminación de aranceles nacionales, la ausencia de un acuerdo deja en zona roja a unas 8.000 familias. Analistas locales advierten que, de no mediar una firma antes de fin de semana, podría dispararse un efecto contagio: otros gremios (docentes, comercio) evalúan nuevas medidas de fuerza en solidaridad y en reclamo de certidumbre laboral.
Red23